Escogiste bien


Autor: Cardón

Fecha publicación: 17/02/2023

Certamen: II Certamen

Resumen

Las vacaciones sufren un giro brusco

Relato

Ni qué decirte, quedé sorprendida de las vistas. Hubo un momento en el que pensé que no llegaríamos. Sus árboles, sus lagos, sus casas. Todo, creí que se iría al garate. Y todo, claro está, sería por tu culpa. Espot se llama este sitio, lo asocio con “el punto” y lo es por su belleza espectacular.
Desde que subimos al coche complicaste todas las cosas, no sé qué querías hacer o decir, pero no pude comprender en ese momento tu secretismo.
Pensé el otro día, al ver el hermoso paraje en las fotos que habías seleccionado, que sería una escapada romántica. Reconozco que antes nos íbamos de excursión por puro placer y disfrute de la naturaleza, lo romántico llegaba después: la brisa acariciando las hojas de los árboles, los crujidos que nos acompañaban, el chapoteo de un pez que se asustaba con nuestra presencia o cuando comían varios un trocito de pan, la caída del agua por las cascadas. Eran momentos preciosos y frescos, también es verdad, fríos o calurosos. Porque algo que teníamos claro era salir a la aventura fuera el día del año que fuese.
No quiero ser nostálgica, pero este parque es precioso y sus montañas interesantes. Miro, bueno, más bien reviso las fotos que habías marcado y pienso que está bien que ahí acampemos. Es un sitio para recordar, ¡me impresiona!
Tienes muy buen gusto. Todos los sitios que hemos visitado desde que estamos juntos han sido espectaculares y este, me quita el aliento. Tienes muy buen ojo para ello.
Qué suerte tuve cuando nos conocimos y aunque más bien fue mi ojo –que no el tuyo– el que se clavó en ti, sigo agradeciéndolo. Rememoro ese tiempo un poco a disgusto porque estabas con ella. Yo no te quería separar de ella, solo que supieras que yo existía y ya vez, el peso del tiempo y la fortuna hizo que te vinieras conmigo. Todavía me confunde que digas que no recuerdas nada… ni que te hubiera drogado. Pero no me voy a ofender.
Y ahora estamos aquí. Es maravilloso que en mochilas tan pequeñas quepan tantas cosas. Qué suerte que tengamos la carretilla plegable, que el parking esté tan cerca y que las cosas pesen tan poco. Salvo tú, que pesas un poquito más de lo que desearía ahora.
Tengo aquí la foto, sigo el camino que trazaste para dejarme ahí. Uso tu pico y tu pala que pensabas usar contra mí.
Dudo que alguien se de cuenta de que aquí, yaces tú, en la X que habías marcado para mí.